Fertilidad & Ejercicio
Lo escuchamos en la escuela, en los consultorios médicos, en campañas de concientización, en anuncios publicitarios y, básicamente, en todos lados: haz ejercicio. Y lo sabemos, el ejercicio es fundamental para la salud. Sin embargo, se habla muy poco del tipo de actividades se deben realizar dependiendo de la edad, el objetivo, los antecedentes médicos y el resto de los factores que están involucrados en la salud física, mental y emocional de cada persona.
Saber qué tipo de ejercicio requiere tu cuerpo y tu mente de acuerdo con su contexto es casi tan importante como realizar el ejercicio mismo. Y, durante una travesía de fertilidad, mantenerse saludable es clave para aumentar las probabilidades de éxito del tratamiento. ¿Cuáles son los ejercicios recomendables para cada proceso? Aquí te contamos un poco de las actividades que puedes realizar dependiendo del tratamiento de fertilidad por el que estés atravesando [o estés pensando en atravesar] y de la etapa de este en la que te encuentres.
Estimulación ovárica: el primer paso de múltiples caminos
Durante un tratamiento de fertilización in vitro, congelamiento de óvulos o embriones, inseminación intrauterina e incluso coito programado, es necesario atravesar por una etapa conocida como estimulación ovárica. Este procedimiento consiste en la administración de medicamentos con la finalidad de incrementar la producción de folículos en los ovarios para su maduración, las hormonas utilizadas durante esta etapa tienden a incrementar el tamaño de los ovarios y, por lo tanto, las posibilidades de sufrir una torsión ovárica. Es decir, la estimulación ovárica puede acrecentar el riesgo de que los ovarios giren sobre sí mismos, se dificulte la circulación sanguínea y sea necesaria una intervención quirúrgica. Afortunadamente, limitar el ejercicio a actividades de bajo impacto reduce el riesgo de atravesar por este padecimiento.
Ejercicios para pacientes en etapa de estimulación ovárica
Ahora probablemente te preguntarás qué es el ejercicio de bajo impacto y qué tipo de actividades abarca. El ejercicio de bajo impacto se distingue por implicar movimientos lentos y suaves, que pueden contribuir al desarrollo y mantenimiento de la masa muscular, estimular la circulación y prevenir lesiones derivadas del exceso de esfuerzo. Estos son algunos de los ejercicios de bajo impacto que puedes incorporar a tu rutina durante el proceso de estimulación ovárica:
- Caminar: pasear algunos minutos al día te mantendrá activx y te ayudará a despejar la mente.
- Estiramientos de bajo impacto o pilates: este tipo de movimientos son perfectos para disminuir dolores de espalda, mejorar la movilidad y reducir la tensión y el estrés.
- Yoga prenatal: hay muchísimos tipos de yoga, y algunos de ellos requieren de movimientos que curvan tu espina dorsal o invierten tu cuerpo por completo. Evita este tipo de posturas; mejor céntrate en los estiramientos y en las posturas de pie, sentadx o acostadx sobre tu espalda.
- Tai Chi: esta técnica ancestral mejora el equilibrio, aumenta la coordinación, incrementa la fuerza y favorece la paz mental.
- Nado suave: a paso lento, sin realizar volteretas o clavados, la natación es excelente para renovar tu energía y movilizar cada extremidad de tu cuerpo.
Recuerda que antes de realizar cualquiera de estas actividades debes consultar a tu especialista en fertilidad: cada persona es distinta y tiene distintas necesidades. Además, es importante que evites cansarte demasiado durante estos ejercicios o realizarlos por periodos de tiempo prolongados. Estar descansadx y saludable es una de las claves para tener una travesía de fertilidad tranquila y amable.
Después de la estimulación ovárica
Una vez que la fase de estimulación ovárica ha terminado, el camino de los tratamientos de fertilidad empieza a bifurcarse. Sin embargo, muchxs especialistas recomiendan evitar el ejercicio completamente por lo menos dos semanas antes de comenzar con el procedimiento [¡y esto incluye al coito programado, la inseminación intrauterina o la captura de óvulos para congelamiento o fertilización in vitro!]. Después de iniciar el tratamiento, las ramas del árbol de las posibilidades toman distintas direcciones.
Por un lado, cuando se trata de un congelamiento de óvulos o embriones, se recomienda esperar dos semanas o hasta después de haber reglado para retomar los deportes o ejercicios habituales, ya que, para este momento, tus ovarios habrán vuelto a su tamaño normal. Por otro lado, en el caso de una transferencia embrionaria durante una fertilización in vitro, una inseminación intrauterina o un coito programado –después de la pausa que recomiende tu especialista en fertilidad–, es posible continuar realizando ejercicios de bajo impacto como los que mencionamos anteriormente. Esta etapa es conocida como la «betaespera» y es un momento clave en el éxito de los tratamientos. Por eso, es fundamental reducir el estrés, evitar la ansiedad y mantener el cuerpo en un estado óptimo.
Más ejercicios para otros tratamientos de fertilidad
Ahora bien, existen algunos procedimientos que no necesitan estimulación ovárica, pero sí consideraciones en términos de actividad física. Por ejemplo, para que un tratamiento de congelamiento de semen sea exitoso, es necesario recabar una muestra que contenga espermatozoides sanos. La calidad de una muestra espermática está determinada por la concentración de células, su morfología y movilidad. Todos estos son criterios que, de acuerdo con múltiples estudios, pueden mejorar considerablemente gracias al ejercicio. Incluso, hay estudios que señalan que realizar actividad física moderada y continua por seis meses puede mejorar la calidad del esperma. Puedes caminar a paso rápido, trotar, andar en bicicleta, bailar, nadar sin prisa, jugar voleibol y realizar aerobics.
Algo similar sucede en el caso del coito programado sin estimulación ovárica y para las personas que desean quedar embarazadas por su cuenta: hacer ejercicio puede ayudar a impulsar la fertilidad al mejorar su salud física, mental y emocional. En estos casos, de igual forma, el ejercicio moderado es excelente para promover el bienestar integral.
El panorama integral
Cada persona vive una travesía de fertilidad distinta. Algunas personas tienen toda la certeza de que el próximo paso de su trayectoria es iniciar una familia, otras saben con toda seguridad que eso no es lo que buscan, y otras aún no han tomado una decisión. Pero, incluso entre quienes forman parte de estos grupos, existen muchas diferencias. Por eso, cada persona necesita de una atención personalizada; una que tome en cuenta cada aspecto de su cuerpo, mente y camino.
En Fertilidad Integral lo sabemos y te acompañamos en cada paso de tu sendero hacia la fertilidad. No somos solo una clínica de fertilidad, somos un centro que cuida todos los aspectos de tu viaje. En nuestras instalaciones encontrarás acompañamiento psicológico, especialistas en nutrición y, por supuesto, clases de yoga enfocadas a fortalecer tanto tu cuerpo como tu mente de acuerdo con tus necesidades específicas. Si tienes alguna pregunta, ¡no dudes en buscarnos! Estamos aquí para apoyarte.